Sin intención de descontextualizar a estas alturas del año, pero sí con muchas ganas de reconocer las buenas acciones, Sal Guía te invita a revivir bellos recuerdos en compañía de unos Reyes Magos muy particulares y cientos de caritas de niños felices.
Ataviados en sus trajes de piel, con chamarras de cuero, lentes oscuros, pantalones de mezclilla, botas de piel y montados en sus imponentes motocicletas, el sábado 13 de enero, llegaron los Reyes Magos Motociclistas a Solferino, Quintana Roo, donde alrededor de 260 niños y niñas ya los esperaban con los brazos abiertos.
Tal cual, Melchor, Gaspar y Baltazar, pero multiplicados por 23, los chopper descendieron de sus vehículos con bolsas llenas de regalos, muñecas, cochecitos, coronas de princesa, sillitas, ositos de peluches, pelotas, bates de beisbol, balones de fútbol y hasta pirinolas, que sin ninguna condición entregaron a los pequeños, quienes pudieron convivir y reír con la payasita quien, de recuerdo, les dio una pulsera hecha con sus propias manos.
Iván López, mejor conocido como “El Pierrot”, explicó que esta entrega de juguetes se realiza gracias a la solidaridad de los integrantes de diferentes clubs de motociclistas y la sociedad en general, para mantener la ilusión y sonrisas de los niños de comunidades mayas.
“Entre todos los recolectamos; cada quien los compra o los reciclamos según sea el caso. Son juguetes en buen estado, que traemos a todos los niños como una buena acción, porque sabemos que a muchos no les llegan los Reyes Magos ni Santa Claus, algunas veces”, agregó en integrante del Club Santa Muerte.
Con un escenario de pequeños montándose en las motocicletas y conviviendo con los benefactores, Iván López señaló que la idea de realizar esta actividad nace de las ganas de hacer sonreír a los niños de escasos recursos del país, ya que en Quintana Roo sólo se han hecho 5 entregas anuales. Al respecto, dijo que en la mayoría de los estados del país se realiza esta actividad desde hace muchos años, incluso en Navidad, Día de Reyes y hasta en Día del Niño.
“La gente tiene una idea muy diferente de los motociclistas, lo menos que se imaginan es verlos entregando juguetes y conviviendo con niños. Aparte, a los niños les gustan las motos y estar en ellas, y se motivan con los juguetes, están contentos; por lo menos un día que los podamos hacer felices”, expresó el entrevistado.
La entrega es una vez al año, en la que se juntan diferentes grupos de motociclistas, y en esta ocasión más de 70 participaron, pertenecientes a Los Renegados, Tábanos, Leyenda, Santa Muerte, Bar Route 666, por mencionar algunos clubes. Finalmente, aclaró que estas entregas se hacen con los permisos necesarios de las autoridades correspondientes, “no venimos solamente a hacerlo. Venimos con anticipación y nos resuelven las autoridades”, concluyó.
Los padres, abuelitos y demás integrantes de familia también recibieron también la tradicional rosca de reyes para convivir en sus hogares.