El auge del alquiler vacacional ha transformado por completo la forma en que la gente viaja a Cancún. Plataformas como Airbnb y Vrbo han ofrecido a los viajeros una libertad, espacio y valor increíbles, permitiéndoles escapar de los límites de un todo incluido tradicional y crear sus propias vacaciones más independientes.
Pero este crecimiento explosivo ha operado en gran medida en un “salvaje oeste” de zonas legales grises, creando un problema de dos caras: la falta de estándares de seguridad para los turistas y lo que la industria hotelera llama competencia desleal.

Ahora, las autoridades de Cancún están interviniendo oficialmente para controlar la situación. Nos sumergimos en las nuevas regulaciones que se están discutiendo y en lo que este debate significa para el futuro de su alquiler vacacional.
El impulso por la regulación y la seguridad turística
El núcleo de la nueva iniciativa es impulsar la estandarización y, lo más importante, la seguridad de los viajeros. El Ayuntamiento de Benito Juárez (Cancún) ya trabaja con grupos turísticos locales en un nuevo conjunto de reglas.
Miriam Cortés Franco, directora de la Asociación de Clubes Vacacionales (Acluvaq), lo confirmó y afirmó que el objetivo es “lograr una normativa justa, pero sobre todo velar por la seguridad de los turistas y de quienes viven cerca”.

Esta medida es una respuesta directa al crecimiento de los alquileres informales: propiedades que ni siquiera forman parte de ninguna plataforma importante y que pueden no contar con inspecciones o permisos de seguridad básicos. Para los viajeros, este nuevo marco regulatorio es, en última instancia, algo bueno. Significa que en el futuro, los alquileres vacacionales se sujetarán a un estándar más alto, lo que garantizará que su Airbnb o su casa de alquiler sea segura y cumpla con las leyes locales.
El otro lado: poderosos llamados a una prohibición total
Mientras algunos grupos presionan por una regulación, un segmento mucho más poderoso y vocal de la industria local exige una solución más extrema: una prohibición total.
Abelardo Vara, presidente honorario de la poderosa Asociación de Hoteles de Cancún, ha sido tajante en sus críticas a la tolerancia de las autoridades hacia estas plataformas. Sostiene que operan ilegalmente y representan una enorme fuente de competencia desleal para la industria hotelera formal, que tiene que cumplir con una montaña de reglas, impuestos y requisitos de licencia.

“Es inconcebible que el gobierno siga permitiendo el funcionamiento de plataformas ilegales”, afirmó Vara, según caribe peninsular. “No deberían ser regulados, deberían cerrarse. Si quieren entrar en la industria hotelera, deberían cumplir con las mismas reglas que todos los demás”.
Este debate de alto riesgo entre “regulación” y “eliminación” es el conflicto central que las autoridades están tratando de sortear ahora.

La visión general del gobierno
Entonces, ¿Cancún realmente prohibirá los Airbnbs? Todas las señales apuntan al no.
La visión general del gobierno parece ser de adaptación, no de eliminación. La gobernadora de Quintana Roo, María Lezama, aclaró recientemente la posición del estado, señalando que el turismo en realidad no ha disminuido, sino que se está “distribuyendo entre nuevos alojamientos y plataformas como Airbnb”.
Este es un poderoso reconocimiento del más alto nivel del gobierno estatal. Señala que ven los alquileres vacacionales como una parte permanente e importante de la oferta turística de la región. El objetivo, por tanto, no es prohibirlos, sino formalizar incluirlos en el marco legal, gravarlos y utilizar esos ingresos en beneficio del destino.

Lo que esto significa para su próximo viaje a Cancún
Si bien es muy poco probable una prohibición total, deberías esperar ver cambios en el futuro cercano que afectarán tu reserva. La era del “salvaje oeste” de los alquileres vacacionales está llegando a su fin.
Para los viajeros, esto probablemente significará:
- Nuevos impuestos: espere que los impuestos turísticos locales y estatales se apliquen de manera más consistente a sus reservas de Airbnb y Vrbo. Esto podría aumentar los precios generales, haciendo que los alquileres vacacionales sean menos atractivos.
- Estándares de seguridad más altos: las nuevas regulaciones probablemente requerirán que los anfitriones tengan elementos de seguridad, permisos e inspecciones obligatorios, lo cual es una gran ventaja para la seguridad de los huéspedes.
- Un mercado más estable: esta medida ayudará a eliminar a los malos actores y los alquileres informales, creando un mercado más seguro y confiable para todos.

La conversación en Cancún ya no es si Los alquileres vacacionales deberían formar parte del panorama turístico, pero cómo. Este nuevo impulso a la regulación es el primer gran paso para crear un futuro más seguro y sostenible para uno de los estilos de viaje más populares del mundo.
