En una decisión histórica que ha tardado años en tomarse, un juez federal confirmó esta semana una medida que impide a las autoridades detener a conductores de viajes compartidos, como Uber, que operan en los más de 70 aeropuertos de México. La noticia, que se aplica a todos los aeropuertos federales, incluidos Cancún (CUN) y Tulum (TQO), está siendo celebrada por las plataformas digitales como un gran paso hacia la “modernización de la movilidad” en el país.

Para los viajeros, esto suena como un sueño hecho realidad: el fin del juego del “gato y el ratón” y el comienzo de viajes compartidos sencillos y económicos. Pero aquí en Sal! Revista debemos aconsejar a nuestros lectores que mantengan la celebración en hielo. Si bien este es un primer paso positivo sobre el papel, no hace nada para cambiar la realidad inmediata sobre el terreno para los viajeros que llegan a Cancún.

El fallo versus la realidad
El fallo judicial es complejo. previene autoridades federales sancionar o detener a conductores en el aeropuerto. Lo que no hace es disolver el poder de los sindicatos de taxis locales, famosos por su fuerza.
Durante años, el aeropuerto de Cancún (ASUR) ha tenido contratos exclusivos y vinculantes con los sindicatos oficiales de taxis para ser el único proveedor de transporte autorizado a solicitar y recoger pasajeros directamente en la acera de llegadas. Este nuevo fallo judicial no anula automáticamente esos contratos ni la poderosa influencia del sindicato.

Como hemos visto en el pasado, un “derecho a operar” legal y el habilidad practica operar son dos cosas muy diferentes en Cancún. Los sindicatos del taxi han sido extremadamente eficaces a la hora de proteger su territorio, y es probable que esta nueva sentencia aumente las tensiones, no las resuelva.
Por qué todavía no deberías intentar conseguir un Uber en la acera
Para la seguridad y eficiencia de su viaje, recomendamos encarecidamente a todos los viajeros que no salgan de la terminal e intenten llamar a un Uber hasta la acera principal de llegadas.

- Es ineficiente: los conductores de Uber probablemente ni siquiera intentarán ingresar a la caótica zona de llegadas, que está controlada por despachadores y taxistas afiliados al sindicato.
- Es estresante: seguirás jugando al juego del “gato y el ratón”. Los conductores seguirán pidiendo a los pasajeros que arrastren su equipaje a través del estacionamiento, hacia la autopista o hacia un “punto de recogida” separado lejos de la terminal para evitar confrontaciones. Esta es una forma atractiva, estresante y confusa de comenzar sus vacaciones.

- Es una preocupación de seguridad: las tensiones entre las aplicaciones de viajes compartidos y los sindicatos de taxis locales son altas. Esta nueva sentencia podría hacer que la situación sea más volátil en el corto plazo. Intentar subirse a un Uber en medio de la zona controlada por taxis es una mala idea que puede llevar a una confrontación incómoda, poniendo en riesgo tanto a usted como a su conductor.
El manual del viajero inteligente: “Negocios como siempre”
Entonces, ¿qué deberías hacer? Por ahora, la respuesta sigue siendo la misma desde hace años: reservar con antelación su viaje es la única forma garantizada y sin estrés de salir del aeropuerto.
Si bien esta decisión del tribunal federal es un paso fantástico hacia el futuro (y necesario con la Copa Mundial de 2026 en el horizonte), es sólo un primer paso. No crea un sistema seguro ni eficiente para los viajeros. hoy.

El Cancún Sun será el primero en informar a nuestros lectores cuando un realse producen cambios prácticos, como el establecimiento de una zona oficial y exclusiva de viajes compartidos, como las de los aeropuertos de EE. UU.
Pero por ahora, y para su próximo viaje de temporada alta, todo sigue igual. La medida más inteligente, segura y sencilla sigue siendo tener un servicio de transporte privado reservado con antelación esperándote.
¡Felices viajes!
